Análisis previo NASCAR Cup Series 2022: Stewart-Haas Racing

Samuel Mateo Giménez

    Este mes de febrero arranca la 74ª temporada de la NASCAR Cup Series, la cual marcará el inicio de una nueva era con la inclusión de la nueva generación de coches. Así, desde SENNA analizamos a todos y cada uno de los equipos que forman parte de la parrilla de esta temporada, y en el día de hoy analizamos al equipo Stewart-Haas Racing.

SHR rindió por debajo de lo esperado en 2021
Foto de NASCAR Digital Media LLC

Análisis anteriores: Front Row Motorsports, RFK Racing, Petty GMS Motorsports, JTG Daugherty Racing, Richard Childress Racing, 23XI Racing, Joe Gibbs Racing, Wood Brothers Racing, Team Penske, Kaulig Racing, Trackhouse Racing Team.

Constructor: Ford.

Motor: Roush Yates Engines.

Pilotos: Kevin Harvick (#4), Aric Almirola (#10), Chase Briscoe (#14), Cole Custer (#14).

Jefes de equipo: Rodney Childers (#4), Drew Blickensderfer (#10), Johnny Klausmeier (#14), Mike Shiplett (#14).

Resultado en 2021 (dueños): 5° (#4), 15° (#10), 23° (#14), 26° (#41).

Cómo llega y a qué aspira:

    Stewart-Haas Racing tuvo la que perfectamente podrían ser catalogada como la peor temporada de su corta historia, dado que llegaba como uno de los equipos referencia, los que peleaban por victorias y campeonatos, pero que se vio peleando por rascar algún top-10 aislado y por el hecho de que sus pilotos entrasen entre los 20 primeros de la general, siempre con la excepción de Kevin Harvick, que fue el único que rodó en posiciones altas en casi todo momento.

    Así pues, el objetivo del equipo de cara a esta temporada es el de volver a la posición que ocupaban anteriormente, en el que eran uno de los equipos de la zona alta de la parrilla, y no uno de la zona media; que sus pilotos ganen carreras, peleen por, como mínimo, estar en los playoffs, y que algunos de ellos profundicen en éstos, llegando a pelear por el título, algo que podrían lograr con su principal espada, Kevin Harvick.

Kevin Harvick:

    El piloto de Bakersfield fue el único que rodó en posiciones altas a lo largo de toda la temporada, pero aún así sus resultados empeoraron respecto a los de años anteriores, debido al pobre rendimiento de los coches del equipo de Kannapolis en el año 2021. Pese a que no ganó ninguna carrera, llegó a la Ronda de 12 , sumó 10 top-5 y 24 top-10 y acabó quinto en la clasificación general final, algo reseñable teniendo en cuenta el nivel del equipamiento.

    Del mismo modo que el equipo buscará volver a su status anterior, Kevin Harvick intentará volver a competir por múltiples victorias y títulos, ya sea el de campeón de la temporada regular o el campeonato final, después de haber estado dos años sin clasificarse para el Campeonato a 4 de la NASCAR Cup Series.

    No hay mucho más que decir acerca de Harvick. Piloto de un talento extraordinario, de los mejores de la parrilla, puede ganar en cualquier momento si el equipamiento se lo permite, y es el principal referente del equipo, el que ha estado tirando del carro del mismo desde el mismo momento en el que le ficharon. Seguirá junto a él, como en todos los años desde que se unieron en 2014, Rodney Childers, jefe de equipo de nivel y una trayectoria contrastada y de éxito.

Harvick maquilló un año malísimo de SHR
Foto de Getty Images

Objetivo: Clasificarse para la Final a 4.

Éxito: Ganar títulos, ya sea la temporada regular o bien el campeonato.

Fracaso: No estar en Ronda de 8 de los playoffs.

Aric Almirola:

    Curiosamente, Aric Almirola, un piloto al que se le achacaba que no ganaba carreras, fue el único que ganó con coches de SHR el año pasado. Dos de ellas no son muy importantes (un Duelo y el Open del All-Stars), pero la tercera sí que lo fue, y mucho. Para un piloto que no estaba ni entre los 25 primeros de la general, la victoria en New Hampshire sirvió para hacer bueno un año terrible, pues además del propio triunfo en sí pudo disputar los playoffs, de los que fue eliminado en la Ronda de 16.

    Para este año, que por cierto será el último de Almirola, que se retirará cuando acabe la temporada, el objetivo es que vuelva la versión constante de Almirola, la que acabe dentro del top-10 en dos tercios de las carreras y que se clasifique con facilidad para los playoffs. Además, lo ideal sería conseguir al menos una victoria más con la que poner el broche de oro a su carrera. En definitiva, hacer de este año una mezcla de los dos anteriores, en el que tenga la constancia de 2020 y gane al menos una carrera como en 2021.

    Para hacer todo ello tendrá un nuevo jefe de equipo, Drew Blickensderfer, que en los dos últimos años ha sido parte importante del éxito que ha tenido Michael McDowell en Front Row Motorsports. Así pues, si el equipamiento vuelve a ser lo que era y Almirola y "Blick" congenian, el piloto de Tampa puede tener más que una digna despedida de la NASCAR.

Almirola ganó en New Hampshire
Foto de Getty Images

Objetivo: Clasificarse para los playoffs.

Éxito: Ganar múltiples carreras y/o profundizar mucho en los playoffs.

Fracaso: No clasificarse para los playoffs.

Chase Briscoe:

    El piloto de Indiana tuvo un año debut difícil, pues el equipamiento que usó fue el peor que ha tenido el equipo en el último lustro y encima no tenía sesiones de entrenamientos libres para adaptarse a correr en las Cup Series, llegando él mismo a admitir que no estaba cómodo en el coche hasta que llevaba el 75% de la carrera. Aún así tuvo alguna carrera buena, sobre todo en circuitos ruteros.

    Este año debería estar, al menos, luchando por entrar en los playoffs, y rodar con mucha más frecuencia entre los diez primeros de la tabla. Si se clasificase para los playoffs su año ya sería bueno, aunque sería mucho mejor haciéndolo ganando una carrera. Sus mejores opciones son los circuitos ruteros, donde se mostró bastante fuerte el año pasado (6° en COTA y Road America, 9° en Watkins Glen y peleando arriba en Indianápolis hasta que se saltó una chicane).

    Hay motivos para creer en Briscoe. El principal motivo es que siempre ha sido un piloto que tardaba en sacar todo su potencial, así que con un año de experiencia y con la vuelta de las sesiones de entrenamientos libres debería rendir mejor que en 2021. De hecho, a lo largo del año pasado ya se vio una progresión, pues obtuvo tres top-20 en las primeras nueve carreras, mientras que en las últimas diez obtuvo siete.

Briscoe pudo haber ganado en Indy
Foto de Getty Images

Objetivo: Clasificarse para los playoffs.

Éxito: Ganar una o varias carreras.

Fracaso: No estar cerca de la lucha por los playoffs.

Cole Custer:

    Cole Custer pudo ser perfectamente el piloto que más defraudó el año pasado, pues después de haber conseguido disputar los playoffs y sumar una victoria en su año debut ni siquiera logró acabar entre los 25 primeros de la general en 2021, con solo dos top-10 en 36 carreras.

    Este año sin duda debería estar en los playoffs, pues está en un equipo que, salvo un nuevo año mediocre, ese es el mínimo exigible. Pese al año desastroso que ha tenido hay razones para creer. El primero es el propio nivel que ha mostrado en los últimos años, pues demostró tener un nivel similar al de Reddick y Bell en las Xfinity Series y fue el Novato del Año en 2020 tras ganar unas carrera y disputar los playoffs. 

    Por otro lado, la presión es algo que no debería afectarle, pues su asiento está garantizado, ya que su padre es el número 3 en el organigrama del equipo, así que tampoco debería cometer errores debido a la necesidad de ir al límite en todo momento por tener que demostrar su valía y ganarse la renovación. Por todo ello, éste debe ser el año en el que Custer debe erigirse como un verdadero piloto de nivel en la parrilla, pues a Harvick, el líder del equipo, no le quedan muchos años (de contrato le quedan dos) y él era el que estaba llamado a ser su heredero hace un par de años.

Cole Custer defraudó mucho en 2021
Foto de Getty Images

Objetivo: Clasificarse para los playoffs.

Éxito: Ganar múltiples carreras y/o profundizar mucho en los playoffs.

Fracaso: No clasificarse para los playoffs.