Análisis del fichaje de Chase Briscoe por Joe Gibbs Racing

Samuel Mateo Giménez

    Hasta el momento, el fichaje más sonado de la parrilla de las Cup Series es el de Chase Briscoe, que será el encargado de remplazar a Martin Truex en el Camry #19 de Joe Gibbs Racing, una vez el piloto de Nueva Jersey ponga punto y final a su trayectoria como piloto a tiempo completo al término de la presente temporada.

Briscoe, con Joe Gibbs y su familia Foto de NASCAR Digital Media LLC

    Así pues, aprovechamos para comentar los aspectos más destacados de este movimiento, qué puede aportar Briscoe a JGR, si es la mejor elección que podría haber hecho el equipo y qué es lo que se puede esperar de él en el futuro:

1. Perfil de Chase Briscoe como piloto.

    En primer lugar, en cuanto al propio Chase Briscoe, cabe destacar que se trata de un piloto de nivel, aunque no lo ha demostrado todavía con suficiente regularidad en las Cup Series. Se trata de un corredor que suma 14 victorias en las series nacionales de NASCAR y que ya sabe lo que es disputar unos playoffs en las Cup Series.

    Es obvio que ahora mismo no tiene un status de estrella, de ser un primer espada, que es lo que se espera que esté en la alineación de pilotos de Joe Gibbs Racing, pero tampoco Martin Truex lo era cuando fichó por Furniture Row Racing y entró en la órbita de JGR en 2016.

    De hecho, su trayectoria recuerda mucho a la de Truex. El de Nueva Jersey fichó en 2014 por Furniture Row Racing y, por entonces, en su palmarés contaba con sólo dos victorias en ocho temporadas corriendo a tiempo completo, pero sí que había destacado mucho en las Xfinity Series, ganando 13 carreras y dos campeonatos (2004 y 2005).

    Por su parte, Briscoe sólo tiene una victoria en las Cup Series, siendo ésta su cuarta temporada en la máxima categoría, pero demostró su valía en las Xfinity Series, ganando 9 carreras en 2020, para alcanzar un total de 11 triunfos en su casillero personal.

    Así pues, Briscoe ha tenido destellos de calidad en el pasado, pero es ahora cuando tiene que convertirse realmente en una verdadera referencia de la parrilla, que es lo que hizo Truex cuando fichó por Furniture Row Racing hace una década.

Briscoe, corriendo este año la Coca Cola 600 Foto de Getty Images

2. Fortalezas y debilidades de Briscoe.

    Chase Briscoe ha demostrado ser un piloto bastante completo a lo largo de los años. Creció corriendo en tierra, lo que le hace ser fuerte en circuitos técnicos y cortos, pero también ha tenido éxito en otros tipos de trazados como los ruteros o los intermedios. Es un piloto que, quizá, no es sobresaliente en ningún trazado, pero que es notable en todos.

    Con las estadísticas en la mano, vemos que Briscoe sumó su único triunfo en las Cup Series en un óvalo de una milla, mientras que en las Truck Series ganó en un intermedio de milla y media como Homestead-Miami y en un óvalo de tierra como Eldora. En las Xfinity Series ha ganado principalmente en intermedios (dos victorias en Las Vegas, una en Kansas, una en Miami y una en Pocono), pero también ha ganado en circuitos cortos (Iowa, IRP y Bristol), en óvalos de una milla (Dover), ruteros (Charlotte Roval) y en un circuito tan técnico y complejo como Darlington, de 1,3 millas pero parecido a un short-track.

    En definitiva, vemos que tiene victorias en todo tipo de trazados, salvo en los Superspeedway, su asignatura pendiente, pero aún con ello, es un balance que pocos pilotos de la parrilla tienen, más allá de las grandes estrellas que siempre son una referencia independientemente del tipo de trazado y sus peculiaridades.

    Por contra, hay ciertos aspectos que Briscoe tendría que corregir, sobre todo ahora que va a correr en una de las mayores escuderías de la parrilla y tiene que dar la talla. El más importante es evitar errores derivados de la impaciencia, como el de Indy RC de 2021, Bristol Dirt de 2022, donde dos victorias fueron desperdiciadas por sendos contactos cuando luchaba por el liderato con otro rival, siendo él el coche más rápido y, sobre todo en Indy, podría haber sido más calmado y preparar el adelantamiento para lograrlo.

Briscoe, corriendo en Darlington Foto de Stewart-Haas Racing

3. Patrocinios.

    Decía Chase Briscoe que una de las cosas que le han convencido para firmar por JGR fue el hecho de que la escudería del ''Entrenador'' fue la única que no preguntó qué patrocinios podría incorporar en caso de firmarle. Eso habla del status que tiene JGR, pero también es un factor clave para Briscoe, en el sentido de que, por primera vez en su trayectoria, no tendrá que estar preocupado por no perder a sus apoyos y que eso le cueste el asiento.

    Ya en 2020 admitió que tenía mucha presión porque Ford había invertido mucho dinero en él y era necesario tener resultados que justificasen esa inversión de dinero, porque de lo contrario podrían poner fin a su estancia en el programa de pilotos de Ford (acabó ganando 9 carreras ese año, por lo que vemos que responde bien a esa presión). Briscoe acostumbraba a tener tan sólo el apoyo de Ford, aunque poco a poco fue ganándose la confianza de empresas como High Point o Mahindra.

    Ahora, podrá estar liberado de esa presión que se tiene al tener que retener como sea a aquéllos que te apoyan, pues Bass Pro Shops, empresa que ha apoyado a muchos pilotos, entre ellos a Truex, el hombre al que Briscoe remplaza, será su patrocinador mayoritario. Como decíamos, Briscoe ha demostrado que sabe rendir ante esa presión de jugarse el asiento en el pasado, pero siempre viene bien reducir lo máximo posible esa presión, y así poder tener menos distracciones más allá de obtener el máximo rendimiento en la pista.

Briscoe, tras ganar en Phoenix en 2022 Foto de Getty Images

4. Otras opciones en el mercado

    Enfocándonos ya en el equipo, Joe Gibbs Racing se veía en la obligación de tener que remplazar a un futuro miembro del Salón de la Fama, el campeón de 2017, Martin Truex, y aunque en principio pueda sorprender que el elegido sea un piloto que sólo tiene una victoria en las Cup Series, si vemos qué opciones había en el mercado de agentes libres, no había otros pilotos que ofreciesen más garantías.

    Entre los pilotos que estaban con posibilidad de fichar, destacan los miembros de Stewart-Haas Racing (Briscoe, Berry, Gragson y Preece), donde Briscoe es claramente el mejor de ellos, al menos actualmente. Otras opción podría ser Harrison Burton, que estuvo en JGR dos años en las Xfinity Series, pero que ha defraudado mucho en los Wood Brothers Racing; 

    Finalmente, quedaba la opción de ''ascender'' a un piloto de Toyota. En las Cup Series hay grandes nombres como Reddick, Erik Jones (que ya estuvo en el equipo entre 2018 y 2020) o Nemechek, pero todos con contrato para la temporada que viene. 

    Además, el único que está haciendo méritos para llegar a JGR es Reddick, que marcha tercero en la general, pues Jones es 28º y Nemechek es 30º, aunque también es cierto a que principalmente se debe a las dificultades que está encontrando Legacy Motor Club para obtener rendimiento en su primer año con Toyota, y ambos son pilotos que han demostrado que su nivel es mucho mayor que ese en el pasado.

    En las categorías soporte hay pilotos interesantes, pero les queda muy grande dar el salto a Joe Gibbs Racing. Chandler Smith es 3º en las Xfinity Series con dos victorias, mientras que Sheldon Creed sigue sin ganar y es 8º. Por su parte, Corey Heim es 2º en las Truck Series con cuatro triunfos. Sin duda, tanto Heim como Smith, principalmente, están completando una gran temporada, pero JGR es la máxima élite y todavía tienen que demostrar mucho más para llegar allí. 

    Además, podría ser contraproducente darle la oportunidad a alguien que todavía no está 100% preparado para ella, como le ocurrió a muchos pilotos que dieron el salto a las Cup Series (sin ir más lejos, el antes mencionado Harrison Burton).

Briscoe, corriendo este año en Atlanta Foto de Getty Images

5. James Small, a la cabeza del equipo.

    Cabe destacar que Briscoe va a heredar al completo el equipo #19 de Truex, y ello incluye al hombre que está al frente del mismo, James Small. Es un dato relevante porque su figura ha estado en tela de juicio desde que asumió el complicado rol de sustituir a Cole Pearn como jefe de equipo de Truex a partir de la temporada de 2020.

    Esto es así porque Cole Pearn tuvo un rendimiento espectacular con Truex. Antes que nada, Truex había sido 24º en 2014, su primer año en Furniture Row Racing, sin victorias. En 2015, el primer año de Cole Pearn como jefe de equipo, un año antes de que Furniture Row Racing estuviera ligada a JGR (por entonces competía con Chevrolet), ganaron una carrera y llegaron a la Final a 4; en 2016, ya con Toyota y aliados a JGR, ganaron 4 carreras; en 2017 ganaron el campeonato, la temporada regular y 8 carreras; y en 2018 ganaron 4 carreras y llegaron a la Final a 4; y en el primer año en JGR, en 2019, ganaron siete carreras y llegaron a la Final a 4.

    Sin embargo, en 2020 James Small y Truex ganaron sólo 1 carrera; en 2021 ganaron 4 y llegaron a la Final a 4; en 2022 no ganaron y no disputaron los playoffs; y en 2023 ganaron tres carreras y la temporada regular. 

    Así las cosas, pese a que los números de James Small y Truex han sido muy buenos en años como 2021 y 2023, ha habido otros años bastante decepcionantes como 2020 y 2022 y, sobre todo, son claramente peores que los de Cole Pearn. Por ello, James Small tiene ante sí una perfecta oportunidad para reivindicarse, pues puede hacer con Briscoe lo que Pearn hizo con Truex, que es convertir a un piloto de buen nivel en una verdadera estrella, y así probar su valía como jefe de equipo de élite.

James Small será el jefe de equipo de Truex Foto de Getty Images

CONCLUSIONES FINALES

    Su fichaje por JGR es una gran oportunidad para Briscoe, posiblemente la mejor que tenga en su carrera, y debe dar un salto de calidad para estar a la altura de las circunstancias, pues hasta ahora se ha mostrado como un piloto con buenas mimbres y algunos destellos de calidad, pero un corredor de JGR tiene que ser una de las referencias de la parrilla para pelear por victorias y campeonatos.

    Por su parte, el equipo ha contratado a un piloto joven, sólido, completo y con bastante futuro por delante, esperando que, emulando a su antecesor en el asiento, esta oportunidad le sirva para crecer y se convierta en un piloto que aporte varias victorias por temporada al equipo y, en un momento dado, pueda pelear por el título.

    En cuanto a sus objetivos, para su primer año su mínimo debería ser el de cualquier piloto de JGR: ganar una carrera y disputar los playoffs. Pero, a la larga, deberá mejorar esos registros, sumar varias victorias por año y profundizar en la post-temporada hasta las últimas rondas, para así pelear por el título.