Análisis del fichaje de Josh Berry por Stewart-Haas Racing

Samuel Mateo Giménez

    El equipo Stewart-Haas Racing ha comunicado oficialmente quién se convertirá la temporada que viene en el sustituto de Kevin Harvick. Se trata de Josh Berry, actual piloto de JR Motorsports en la NASCAR Xfinity Series y quién ha sido sustituto de varios pilotos de las Cup Series en los últimos años.

Berry se ha unido a SHR
Foto de NASCAR Digital Media LLC

    Así las cosas, analizamos qué puede aportar Berry a SHR, qué se puede esperar de él y las principales claves de este movimiento del mercado:

1. Piloto de calidad.

    En cuanto al perfil de piloto de Josh Berry, podemos afirmar que se trata de un piloto de nivel. De hecho es un rara avis, alguien que ha llegado al máximo nivel gracias, principalmente y casi en exclusiva por momentos, a su talento y sus resultados. Es alguien que ha estado en el barro luchando por su sueño en categorías minoritarias como la NASCAR Weekly Series o el CARS Late Model Tour, de los que se proclamó campeón en 2020 y 2017 respectivamente.

    Es el piloto que más victorias ha ganado jamás en CARS Tour y su palmarés, por tanto, está repleto de victorias en Late Models. Todo ello, así como su amistad con Dale Earnhardt, hizo que éste le diera una oportunidad a tiempo parcial en las Xfinity Series para 2021 sabiendo que perdería dinero porque casi nadie le patrocinaría, pero Berry respondió ganando dos carreras. 

    Cuando Earnhardt le dio un asiento a tiempo completo en 2022, ganó otras tres y se clasificó al Championship 4 para pelear por el campeonato en la cita final.

    Como vemos con este pequeño resumen de su carrera, es alguien que ha demostrado su valía en numerosas ocasiones, a veces estando bajo mucha presión sabiendo que esa iba a ser su única oportunidad, todo ello sin tener el apoyo de grandes compañías detrás de él, ni tampoco el de una matriz del sector.

Berry, tras ganar las Weekly Series
Foto de Getty Images

2. Rendimiento inmediato.

    Como Berry ha tenido, a lo largo de su carrera, que aprovechar las pocas oportunidades que le han dado, ha desarrollado una gran capacidad para rendir a su mejor versión o cerca de ella prácticamente desde el mismo en el que se sube por primera vez a su coche.

    Así las cosas, en las Xfinity Series, en los años en los que corría una carrera aislada acostumbrada a pelear por el top-10. Cuando Dale Earnhardt Jr. le dio un asiento para 12 carreras en 2021, ganó una, fue segundo en otras dos y sumó seis top-10.

    Cuando acabó su participación en el coche #8 de JR Motorsports y Jordan Anderson Racing le dio la oportunidad de correr varias carreras con ellos ese año, acabó en el top-10 en sus primeras dos citas en ese coche, que no estaba preparado para ello.

    Cuando también ese mismo año recibió la confianza de Earnhardt para sustituir ese mismo año a Annett mientras se recuperaba de una lesión de espalda, sumó una victoria, dos top-5 y cuatro top-10 en las cinco carreras en las que remplazó a Annett.

    Cuando empezó, ya en 2022, a correr en JRM a tiempo completo, logró sumar tres victorias y, más importante, clasificarse a la final a cuatro para pelear por el campeonato en su primera temporada corriendo a tiempo completo en las series nacionales de NASCAR.

    Y finalmente, cuando este año recibió la confianza de Hendrick Motorsports para sustituir en las Cup Series temporalmente a sus pilotos lesionados, Chase Elliott primero y Alex Bowman después, pese a no tener más que dos carreras de experiencia en esa categoría, logró acabar segundo una carrera y sumar otros dos top-10 más.

    En definitiva, siempre ha rendido bien desde el principio, sin la necesidad de estar muchas carreras, ni mucho menos todo un año, para poder llegar a su mejor versión, ya que no podía permitirse ese lujo.

Berry, ganando en Las Vegas en la NXS de 2022
Foto de Getty Images

3. Experiencia previa.

    Como decíamos, Josh Berry ya acumula algo de experiencia previa en la NASCAR Cup Series, dado que debutó el año pasado en Spire Motorsports, la de Dover concretamente, en la que fue 30º, un resultado que no es espectacular pero tampoco es malo para ser debutante y correr en un equipo modesto. Luego corrió en Michigan y mejoró, acabando 26º.

    Esta temporada está sumando muchas más participaciones como piloto interino, pues disputó cinco carreras mientras Chase Elliott se recuperaba de una rotura de tibia y luego se subió al coche de Alex Bowman durante otras tres carreras.

    Así las cosas, pese a que no tiene tanta experiencia en el primer nivel como el anterior fichaje del equipo, Ryan Preece, que había disputado más de un centenar de carreras en las Cup Series, no llega tan verde como el previo, Chase Briscoe, que jamás había corrido en las Cup Series.

Berry, sustituyendo a Elliott en Las Vegas
Foto de Getty Images

4. Factor Rodney Childers.

    Sin duda, una de las mayores ayudas que va a tener Josh Berry para poder tener un buen papel en SHR es contar con Rodney Childers como su jefe de equipo. Se trata de uno de los mejores de la parrilla, que ha demostrado su valía no sólo desde que está con Harvick en el equipo (desde 2014), un período de tiempo en el que han ganado un campeonato (el de 2014), tres temporadas regulares (2015, 2016 y 2020) y 37 carreras.

    Más allá de eso, tenemos que recordar que Childers antes estaba en un equipo de perfil medio como Michael Waltrip Racing, y consiguió que pilotos también de perfil medio como David Reutimann y Brian Vickers ganasen carreras (el primero ganó la Coca Cola 600 en 2009 y la carrera de Chicagoland en 2010 y el segundo en New Hampshire en 2012).

    A lo largo de los años Childers ha demostrado que es de los mejores en lo suyo, hasta el punto de que, cuando Harvick se retire al término de la temporada, seguramente él sea la única pieza de primer nivel que tenga el equipo entre sus filas.

Rodney Childers será el jefe de equipo de Berry
Foto de Getty Images

5. Patrocinios.

El gran inconveniente que ha tenido Berry a lo largo de los años ha sido que no ha contado con apoyos que le permitieran gozar de distintas oportunidades para mostrar su talento, siendo especialmente dramático el caso de los patrocinios.

    En ese sentido, parece que va a tener que lidiar una vez más con esos problemas, dado que en su presentación como piloto de SHR no hubo ni un sólo logotipo o mención a una compañía, sino que tan sólo aparecían los del equipo y los de Ford, el constructor que usa la escudería.

    Además, el co-propietario Tony Stewart afirmó que no tienen patrocinadores para ninguna de las carreras del año que viene.

    Bien es cierto que al otro co-propietario, Gene Haas, no le ha temblado la mano a la hora de poner dinero de su bolsillo y patrocinar sus coches con su propia empresa de maquinaria industrial Haas Automotation, pero eso lo hacía cuando patrocinaba un coche de los cuatro. 

    Sin embargo, si va a tener que patrocinar ahora al coche #4, unido al de Custer en las Xfinity Series (y no hablemos si Almirola se retira, pierden el patrocinio de su socio Smithfield y Custer vuelve a las Cup Series) y algunas carreras que también ha tenido que patrocinar a Preece en el #41, quizás se vea abocado a tener que contratar en el futuro a un piloto de pago o alguien que al menos aporte algún patrocinador, de modo que Berry, si no rinde bien, podría perder su oportunidad, pues es el que menos dinero aporta (porque no aporta básicamente, al menos por el momento).

    Por contra, las palabras de Stewart en la presentación deberían tranquilizarle, dado que dijo textualmente que no quiere niños recién graduados que corran con el dinero de su padre, sino que quiere a hombres contrastados que sepan pilotar al máximo y llegar al límite con los medios de los que dispongan.

    En cualquier caso, el hecho de que por ahora no tengan apoyos no significa que no vayan a tenerlos. Bien es cierto que el futuro no parece halagüeño dado que se rumorea que el principal patrocinador del coche #4 actualmente, Busch (cerveza de la matriz de Budweiser) puede abandonarles para ir con Chastain a Trackhouse, pero quizás logren retenerla o encontrar otro y otros patrocinadores que le sustituyan.

Berry, corriendo este año en Sonoma con JRM
Foto de Getty Images

CONCLUSIONES GENERALES Y EXPECTATIVAS 

    En resumen, Berry es un buen piloto, que ha dejado grandes muestras de talento y que suele adaptarse con facilidad. Además, se trata de un piloto con experiencia que está en una etapa de madurez que le debe permitir exprimir el equipamiento al límite, para lo que contará con la ayuda de un gran jefe de equipo como Rodney Childers.

    Así las cosas, teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra el equipo, para su primera temporada sería ideal clasificarse a los playoffs y ganar al menos una carrera, pues debemos tener en cuenta que ya SHR no es lo que en su día fue, y es casi imposible verle ganar múltiples carreras como en su día hizo Harvick, que llegó a ganar 8 en 2018 y 9 en 2020.