Chevrolet y su programa "Atrápalo Todo".

Samuel Mateo Giménez

    Los pilotos jóvenes son muy apreciados en NASCAR, como en cualquier categoría del automovilismo mundial, ya que son los que están llamados a construir un gran legado en el futuro. En ese sentido, en NASCAR se han ido poniendo en marcha programas para desarrollar el talento joven en los últimos años, como el Toyota Racing Development de la firma nipona, el Drivers Development Program de Ford o el Drivers Edge Development de Chevrolet. 

Chevrolet está en un buen momento
Foto de Chevrolet

    Precisamente es ese último el que está funcionando mejor que nunca, pues en los últimos tres años, es decir, desde el año 2020 (para competir en 2021), 2021 (para competir en 2022) y en 2022 (para competir a partir de 2023), Chevrolet ha ido reclutando numerosas perlas de futuro, que unidas a las que ya tenía, han configurado el combinado más fuerte de los tres de la actual parrilla de las series nacionales de NASCAR.

    Así las cosas, en las Cup Series, a los talentos jóvenes (menores de 30 años) que ya tenía (Chase Elliott, William Byron, Alex Bowman...) unieron a un rescatado Kyle Larson, una vez finiquitada la polémica por lo que sucedió en aquella carrera virtual, en una alineación de estrellas para Hendrick Motorsports, su buque insignia. Además, otros equipos Chevrolet han ido promocionando pilotos jóvenes, como Justin Haley en Kaulig Racing, o se han hecho con los servicios de otros jóvenes talentos como es el caso de Erik Jones con Petty GMS Motorsports o Daniel Suárez con Trackhouse Racing Team. La última incorporación es la de Noah Gragson, que tras rendir a buen nivel con KBM y Toyota en las Truck Series fue reclutado por JRM y Chevrolet para correr en las Xfinity Series y que el año que viene acompañará a Jones en Petty GMS Motorsports.

Elliott, corriendo en las Cup Series
Foto de Getty Images

    A todo ello, hay que unir lo bien articulado que tienen su programa en la segunda división nacional, la NASCAR Xfinity Series, en las que en las filas de equipos Chevrolet encontramos a talentos propios que han ido desarrollando, caso de Sam Mayer, Sheldon Creed o Myatt Snider, pero también a otros pilotos de nivel que han reclutado de otros programas, como Chandler Smith, Austin Hill y Brandon Jones, llegados desde Toyota entre el año pasado y este. Tampoco podemos olvidar a pilotos jóvenes que en un pasado estuvieron ligados a Chevrolet y equipos Chevrolet que se fueron pero regresaron, como Daniel Hemric o Anthony Alfredo.

Mayer, corriendo en las Xfinity Series
Foto de Getty Images

    Finalmente, en las Truck Series, quizás es donde tienen su mayor lunar, pues actualmente sólo hay un piloto menor de 30 años corriendo a tiempo completo en las Truck Series que haya demostrado de verdad ser capaz de hacer grandes cosas, que es Carson Hocevar. Por ahora, Chase Purdy, Jack Wood, Lawless Alan,m, Colby Howard, Blaine Perkins e incluso Derek Kraus están lejos de alcanzar un rendimiento que les permita pelear por campeonatos en esa categoría.

Hocevar, corriendo en las Truck Series
Foto de Getty Images

    Sin embargo, el abanico de pilotos en los que puede fijarse Chevrolet es tan amplio y variado que no es necesario, al menos a corto plazo, seguir sacando talento, pues, como decíamos, a los jóvenes que ya tenía (Elliott, Byron, Bowman, Creed, Mayer...) se han unidos muchos otros (Chandler Smith, Austin Hill, Brandon Jones, Gragson...). 

    Y lo más destacable no es ésto, sino que encima han logrado compaginar esa labor con la de atraer a uno de los mayores nombres que hay en la competición, como es el caso de Kyle Busch, quien dejó atrás su etapa en Joe Gibbs Racing y Toyota para poner rumbo a Richard Childress Racing. Ésto es un fichaje de campanillas que supone la guinda del pastel que es el programa de pilotos de Chevrolet.

Creed, corriendo en las Xfinity Series
Foto de Getty Images

    Además, a diferencia de Ford y Toyota, que han atraído talento pero que por contra han perdido grandes nombres por el camino, Chevrolet apenas tiene que lamentar pérdidas, pues la más reseñable de todas ha sido la de Tyler Reddick, que pone rumbo a 23XI Racing para remplazar a Kurt Busch. Más allá de él, ningún otro piloto menor de 30 años que corrió a tiempo completo en la NASCAR Cup Series de 2020 ha abandonado equipos de la firma de General Motors. Incluso Ty Dillon, que tiene 30 y abandonará al término de este año Petty GMS Motorsports, no abandona Chevy, pues se va a Spire Motorsports, donde se unirá a otro buen piloto de Chevrolet como LaJoie (31 años). De igual modo, en las Xfinity Series no perdieron a nadie relevante.

Hill, corriendo en las Xfinity Series
Foto de Getty Images

    

    Sí que lo hicieron en las Truck Series, pues Zane Smith, Chase Purdy y Tyler Ankrum abandonaron el equipo estrella de Chevrolet, GMS Racing, para ir a Front Row Motorsports-Ford (en el caso del primero) y Hattori Racing Enterprises-Toyota en el caso de los dos últimos. Sin duda son pérdidas asumibles, sobre todo las de HRE, pues no han demostrado gran cosa en los últimos años y, de hecho, Purdy el año que viene no volverá al equipo ya que no le han renovado (curiosamente, vuelve al paraguas de Chevrolet, ya que correrá con Kyle Busch Motorsports). En cuanto a Ankrum, su primer año en David Gilliland Racing fue muy bueno, pero en GMS Racing decepcionó y en HRE lo ha vuelto  a hacer. Zane Smith sí que es una pérdida sensible, sobre todo porque ahora está en el mejor momento de su carrera, pyes acaba de ganar el campeonato, pero cuando logras reclutar tanto talento perder sólo a un piloto que al menos por ahora no ha demostrado ser mucho mejor que los otros es asumible. Ayer se confirmó que Dean Thompson se uniría a TRICON Garage, pero es otra pérdida asumible porque el año pasado no rascó ni un top-10 corriendo a tiempo completo en Niece Motorsports.

Erik Jones, corriendo en las Cup Series
Foto de Getty Images

    En conclusión, Chevrolet ha ido construyendo un programa de pilotos que, al menos actualmente, es el mejor de los tres de la parrilla de las Cup Series, repleto de talento y que hace presagiar un gran futuro a corto-medio y seguramente largo plazo a la marca de General Motors.