Análisis del fichaje de Ryan Preece por Stewart-Haas Racing.

Samuel Mateo Giménez

    La semana pasada, Stewart-Haas Racing anunció que Ryan Preece, que había sido su piloto de desarrollo durante la temporada de 2021, se convertirá en piloto titular del equipo, pues empezará a correr en el Ford Mustang #41 que venía utilizando Cole Custer.

Preece correrá con SHR
Foto de NASCAR Digital Media LLC

    Así las cosas, desde SENNA analizamos qué puede aportar Ryan Preece al equipo y qué se puede esperar de él en la temporada de 2023:

1. Piloto con talento.

    Ryan Preece ha demostrado en el pasado ser bastante habilidoso, sobre todo cuando ha tenido un equipamiento a la altura. Por ejemplo, logró ganar su primera carrera en las Truck Series, en Nashville allá por 2021, y este año en diez carreras ha sumado una victoria, 7 top-5 y 9 top-10 en diez carreras en dicha categoría, todo ello con David Gilliland Racing.

    En las Xfinity Series, cuando corrió a tiempo parcial en Joe Gibbs Racing, entre 2017 y 2018, sumó dos victorias, 11 top-5 y 14 top-10 en 19 carreras. En JR Motorsports cuatro carreras en 2019 y sumó un top-5 y cuatro top-10. Este año, corriendo con BJ McLeod Motorsports pero con coches de SHR, ha sumado un top-5 y dos top-10 en tres carreras.

    Como vemos, siempre que ha tenido un coche que le permitís rendir bien ibal menos de manera competitiva lo ha hecho. Ha respondido a lo que se esperaba de él e incluso podríamos decir que lo ha hecho con creces, puesto que sus números son bastante buenos en comparación con la de otros pilotos que han tenido similares oportunidades.

Preece, camino de la victoria en Iowa
Foto de Associated Press

2. Piloto veterano pero todavía joven.

    No podemos decir que Preece sea extremadamente joven, pero tampoco tiene una edad muy avanzada, puesto que tiene 32 años. Es decir, está en la edad que normalmente se considera la mejor, la óptima, para un piloto de NASCAR, que es la de la treintena.

    Además, acumula mucha experiencia (115 carreras en las Cup Series, más otras 74 entre las Xfinity Series y las Truck Series) con diversos y variados equipos que le pueden haber permitido adquirir muchos conocimientos con los que ayudar a un equipo que, en los últimos años, se ha caracterizado por la pérdida de experiencia, sustituyendo a veteranos como Kurt Busch y Clint Bowyer por jóvenes como  Custer y Briscoe.

Preece, corriendo en Miami en 2020
Foto de Getty Images

3. Experto en circuitos cortos.

    Su mejor baza para ganar carreras serán los circuitos cortos, pues él ha obtenido los mayores éxitos de su carrera en esos circuitos (es el campeón del NASCAR Whelen Modified Tour de 2013, sus victorias en las Xfinity Series fueron en Iowa y Bristol y en las Truck Series en Nashville, que mide más de una milla pero en el que se corre como si fuera un short-track).

    Así pues, habrá que estar muy atento a su desempeño en circuitos como Martinsville, Bristol, Richmond, New Hampshire (en esos dos últimos ha ganado carreras en el Modified Tour), Nashville o Gateway, pues son circuitos cortos o circuitos en los que se corre de manera similar ya que rebasan por muy poco la milla de extensión y tienen poco peralte.

Preece, tras ganar en Loudon en 2021
Foto de Getty Images

4. Motivado ante la mejor oportunidad de su carrera.

    Preece debería afrontar la próxima temporada con la mayor de las motivaciones, puesto que es la mayor oportunidad que le han dado jamás y debe aprovecharla para labrarse un futuro exitoso en el más alto nivel del automovilismo estadounidense.

    Obviamente va a tener más presión que nunca, pero debe ser consciente de que si desde el equipo (concretamente Tony Stewart) han apostado tan fuerte por él, en detrimento del hijo del  número tres en la jerarquía de la escudería, es porque están convencidos de sus capacidades, lo cual debe servirle para estar calmado y que no le afecte la presión.

Preece, tras ganar en Nashville
Foto de Getty Images

5. Corregir episodios oscuros del pasado.

    Si bien antes hemos dicho que cuando ha tenido equipamiento de calidad ha rendido bien, también es cierto que en ocasiones, concretamente en su etapa en las Cup Series con JTG Daugherty Racing, ha tenido malos momentos. En ese equipo fue 26º en su primer año, 2019, algo que está bien para ser esa escudería, aunque su compañero Buescher fue 20º. Al año siguiente, cuando se esperaba un poco de mejoría, mientras que Stenhouse (sustituto de Buescher) fue 24º, él fue 29º, incluso detrás de Kenseth, que se había perdido las primeras cuatro carreras e hizo un año horrible.

    Este año fue cuando vivió su peor momento en las Cup Series, pues hacia mitad de temporada encadenó tres últimos puestos consecutivos (Indy, Kentucky y Texas) y una racha de dos top-20 en diez carreras que luego maquilló con una buena recta final de campeonato (dos top-10 y ocho top-20 en las últimas diez carreras). 

    En un año de reivindicación como 2021 empezó fuerte, con dos top-10, pero poco a poco se fue apagando, y al final acabó 27º, mientras que Stenhouse fue 22º. Así pues, cierto es que JTG Daugherty Racing no era un gran equipo, pero debería haber estado más cerca de alguien como Stenhouse y para nada tan atrás.

    Además, tiene que tratar de reducir un poco su número de abandonos por accidente, que en esas tres temporadas fue de 14 (4 en 2019, 5 en 2020 y otros 5 en 2021).

Preece, corriendo en Charlotte en 2020
Foto de Getty Images

6. Adaptación inmediata o casi.

    Ryan Preece podría, o debería, mostrar su mejor versión prácticamente desde el inicio, ya que conoce la categoría (115 carreras a sus espaldas), el equipo (lleva siendo un año el piloto reserva y de desarrollo) y el nuevo coche (disputó las carreras de Dover y Charlotte con Rick Ware Racing). 

    Bien es cierto que a fin de cuentas sólo ha corrido dos veces con la Next Gen, pero también habrá usado mucho el simulador del equipo (aunque no es exactamente igual a la realidad sí que se asemeja).

    Es por ello por lo que su período de adaptación no debería prolongarse mucho, y desde luego debería ser más corto que el de otros pilotos como Briscoe, que no se había subido jamás a un coche de las Cup Series hasta debutar como piloto a tiempo completo.

Preece, corriendo en Charlotte este año
Foto de Getty Images

7. Posibles patrocinios.

    Es algo que no se ha confirmado pero es bastante probable que si Preece ha obtenido el asiento es porque haya conseguido patrocinios. A fin de cuentas el coche #41 lo pagaba casi al completo Haas con su empresa Haas Automotation, aunque también hubiera algún patrocinador minoritario como Dixie Vodka.

    Ahora es posible que veamos otros patrocinadores como Hunt Brothers Pizza, que es la empresa que ha patrocinado a Preece en algunas de sus carreras este año, como en Charlotte en las Cup y las Xfinity Series y, en las Truck Series, en su victoria en Nashville y las carreras de Sonoma y Pocono. Puede tratarse de una firma que esté contenta con él ya que le ha dado dos victorias, pues recordemos que también era el patrocinador cuando ganó en Nashville en 2021.

    También podría encontrar el apoyo de United Rentals, que le patrocinó en Dover en las Cup Series, en Nashville en las Xfinity Series y en Darlington y Las Vegas en las Truck Series este mismo año; o de Morton Buildings, que le patrocinó en las Truck Series en Texas, Kansas y Atlanta; así como Racechoice.com, que le apoyó en esa categoría en Talladega y Charlotte.

Preece, corriendo en las Truck Series
Foto de Getty Images

CONCLUSIONES FINALES

    Ryan Preece, en principio, es una buena incorporación para Stewart-Haas Racing, que tenía un coche totalmente desperdiciado y que ahora tendrá en él a un piloto que en el pasado, cuando le han dado material de calidad, ha respondido de buena manera, y que tiene potencial para poder aspirar a grandes cosas.

    Ahora bien, en el pasado ha dejado dudas cuando ha corrido al más alto nivel, las Cup Series, por lo que ahora que recibe esta oportunidad deberá mejorar un poco y mostrar un nivel más alto, sobre todo si quiere ser un líder dentro del equipo. Digamos que, de hacerlo como aparentemente ha hecho este año Briscoe, podrá ser un piloto de referencia en la categoría, pero si es superado por sus compañeros y no exprime al límite su equipamiento, simplemente será un relevo de garantías de Almirola, esto es, un piloto de nivel, completo, sólido, pero que no va a ganar muchas carreras ni campeonatos. Simplemente sería un buen complemento para la alineación.

    Como objetivos, dependerá mucho de lo que sea en su conjunto Stewart-Haas Racing, pues no es lo mismo el nivel del equipamiento que esta escudería tenía desde 2015 sobre todo hasta 2020 con el que ha tenido los últimos dos años. Si siguen estancados, clasificarse a los playoffs, a ser posible con una victoria, sería un buen resultado, pero si logran volver a ser una escudería de referencia eso sería su suelo, el mínimo exigible, no un objetivo ambicioso, así que para demostrar toda su valía debería profundizar algo en los playoffs y al menos ganar una carrera pero también pelear por victorias regularmente, y no de manera esporádica.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fran Benítez: ''A Totana voy sin presión. Somos campeones de la Clase 5C y vamos a disfrutar la carrera''

Análisis de la Ronda de 16 de la NASCAR Cup Series de 2023

Análisis del Championship 4 de la NASCAR Cup Series de 2023