Análisis del fichaje de Brad Keselowski por Roush Fenway Racing

Samuel Mateo Giménez

    La noticia de Brad Keselowski abandonando Team Penske para unirse a las filas de Roush Fenway Racing es y será, salvo sorpresa, la más destacada de la temporada, pues juntos aspiran a devolver los días de gloria a la escudería de Concord, al tener el propio Keselowski parte del accionariado del equipo a partir del año que viene.

    Así las cosas, desde SENNA analizamos el fichaje de Brad Keselowski por Roush Fenway Racing, sus ventajas, inconvenientes y qué podemos esperar del piloto de Michigan en esta nueva etapa de su carrera:

Keselowski correrá con RFR
Foto de Getty Images

1. RFR vuelve a tener un piloto top.

    Lejos quedan aquellos días en los que en Roush Fenway Racing había pilotos que peleaban por el campeonato. El cénit del equipo se produjo entre 2003, año en el que Matt Kenseth ganó el campeonato, y 2005, año en el que sus cinco pilotos se clasificaron para la Caza por la Copa, cuando por entonces sólo 10 lo hacía, y entremedias sumaron otro campeonato, el de 2004, con Kurt Busch.

    Con el paso de los años, esa alineación de ensueño de 2005 se fue desintegrando, pues Kurt Busch abandonó el equipo en 2006, Mark Martin lo hizo en 2007, Kenseth en 2013, Edwards en 2014 y Biffle se retiró al término de 2016, cuando ya había bajado notablemente su nivel.

    Así las cosas, después de casi una década alejados de las victorias reiteradas, la lucha por el campeonato o, simplemente, clasificarse para los playoffs, la llegada de Keselowski supone que tendrán un piloto capaz de hacer todo ello, a expensas de saber si el equipamiento del que dispondrá el equipo se lo permitirá. 


    Obviamente, a día de hoy no se le puede pedir a Keselowski que gane el campeonato, pero si con la contratación de Newman en 2019 o la de Buescher en 2020 el equipo ha estado luchando (y consiguiéndolo en 2019) estar presente en los playoffs, con Keselowski podrán hacerlo perfectamente el año que viene, y a partir de ahí ir mejorando el equipamiento para que Keselowski siga obteniendo mejores resultados.

    Se podría decir que, en el mejor de los casos, la llegada de Keselowski supone aquéllo que supuso en su día para Haas CNC Racing la llegada de Tony Stewart, quien les permitió dejar de ser un equipo de media tabla para ir mejorando poco a poco y, en un margen de unos cuantos años, ser un equipo campeón.

    En esta ocasión, si RFR hace las cosas bien, puede que incluso se reduzca el plazo para volver a estar en situación de pelear por victorias e incluso campeonatos, pues la nueva generación de coches que se introducirá el año que viene busca reducir las distancias entre equipos con medidas como la de usar un chasis único. 

Keselowski, corriendo en New Hampshire
Foto de Getty Images

2. Experiencia para el equipo. 

    Desde que esa generación de grandes pilotos fue yéndose del equipo, Roush Fenway Racing fue apostando por dar paso al talento joven, con la sustitución de todo un campeón como Kenseth por el debutante Ricky Stenhouse Jr. allá por 2013 o las contrataciones de Trevor Bayne en 2014. 

    Sin embargo, los pobres resultados han hecho que recientemente, el equipo apostase por pilotos curtidos, llegando a cambiar a Bayne por Ryan Newman en 2019 o contratando a un ya formado Chris Buescher en 2020. Así, el fichaje de Keselowski será otro paso más en esa dirección, pues tiene 37 años y está en su 12ª temporada como piloto a tiempo completo.

    Así, Keselowski aportará mucha experiencia y veteranía al equipo, la cual vendrá bien al otro piloto del equipo, Chris Buescher, que ya ha dado un salto de calidad este año respecto a 2020, posiblemente fruto, al menos en parte, de haber colaborado con Ryan Newman. 

Newman, en imagen, será sustituido por Keselowski
Foto de Getty Images

3. Un digno sucesor de Jack Roush en el apartado de gestión deportiva.

    Pese a que Jack Roush, fundador y copropietario del equipo, sigue muy involucrado con el día a día del equipo, es obvio que no podrá estar al frente del mismo eternamente, y su avanzada edad (79 años) le obligaban a buscar a un sucesor.
    
    Éste podría haber sido su socio, la empresa Fenway. Sin duda, sabrían gestionar la escudería, pues son los dueños de otras organizaciones deportivas de éxito como los Boston Red Sox o el Liverpool FC, pero no conocen los entresijos de una escudería de carreras al no estar especializados en dicho ámbito.

    Sin embargo, Keselowski sí que los conoce, y además, tiene experiencia, pues ya fue propietario de un exitoso equipo de carreras en la NASCAR Truck Series, Brad Keselowski Racing. De esta forma, Keselowski tomará el mando de la gestión deportiva del equipo, la cual será administrada eficientemente, pues es algo que ya se hizo en BKR.

Jack Roush es miembro del
Salón de la Fama de NASCAR
Foto de Getty Images

4. Posibilidad de expandir el equipo y crear cantera.

    La llegada de Keselowski, además de suponer que RFR tenga de nuevo un piloto que, con el equipamiento adecuado, les permita luchar por todo, y de tener a un digno gestor deportivo, supone la llegada de más inversión, pues para un patrocinador es atractivo invertir en un campeón como Keselowski.

    Así, el equipo tendrá más financiación que podría destinar a expandir su marca, y, de hecho, ya se rumorea, a raíz de un tweet del propio Keselowski, que puedan desembarcar de nuevo en las Truck Series, donde ganaron un campeonato en 2000 con Biffle. 

    Ésto también permitiría, a su vez, crear una red de jóvenes pilotos que podrían llegar a correr en RFR en el futuro, algo que no sucede actualmente, pues RFR no tiene equipo en las Xfinity Series tampoco desde 2019. 

    Además, Keselowski tiene buen ojo para fichar jóvenes talentos, pues por su escudería pasaron pilotos como Ryan Blaney, Tyler Reddick, Austin Cindric o Chase Briscoe. 

Briscoe y Cindric, corriendo con BKR en 2017
Foto de Getty Images

¿QUÉ SE PUEDE ESPERAR DE ESTE FICHAJE?

    En definitiva, el fichaje de Keselowski puede ser, si todo marcha sobre ruedas, un punto de inflexión en la historia de Roush Fenway Racing. En efecto, la contratación del piloto de Michigan supone que el equipo volverá a tener un piloto de primer nivel que le permitirá volver a los días de gloria del equipo, pero también es un gran activo que puede impulsar una época de éxito y prestigio mediante la atracción de nuevos patrocinadores y, si finalmente regresan a las categorías inferiores, de la formación de jóvenes y talentosos pilotos, algo que escasea dentro del programa de Ford. 

    Ahora bien, en lo que se refiere sólo al rendimiento en pista, el equipo ya no es lo que era, así que no se le puede pedir que luche directamente por el campeonato el año que viene, pues este año, salvo que ganen alguna de las próximas cuatro carreras, ni Chris Buescher ni Ryan Newman, actuales pilotos del equipo, van a clasificarse para los playoffs.

    El hecho de hacerlo sería un objetivo realista de cara al año que viene, y a partir de ahí ir progresando para, en un intervalo de tiempo, poder volver a situar a Roush Fenway Racing en lo alto de la tabla, algo que no sucede desde hace tres lustros. 

Keselowski, celebrando su título de 2012
Foto de Getty Images

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