¿Cuál es el futuro de Red Bull?

 Samuel Mateo Giménez

    Con la espantada protagonizada en el día de ayer, el horizonte de Red Bull parece más que confuso. Han perdido su motorizador, y las restantes opciones que hay a día de hoy en el campeonato son escasas y, para más inri, no tienen buen trato con ellos.

    Tres son los suministradores de motor actualmente, además de Honda: Renault, Mercedes y Ferrari.

    En primer lugar, tenemos a  Renault. Lo lógico sería pensar que Red Bull llevará motor Renault, pues la marca gala ha perdido su único cliente, McLaren, que cambia a Mercedes en 2021, y solo suministrará a su propia escudería, Alpine. Además, Red Bull cosechó sus grandes éxitos (los cuatro mundiales de Vettel y los de constructores entre 2010 y 2013) con Renault. No obstante, la relación entre ambas firmas, que acabó en 2018, no fue precisamente un divorcio amistoso. Numerosas fueron las acusaciones entre ellos, especialmente de Red Bull a Renault, de modo que no parece que Renault esté contento con volver a motorizar a Red Bull. 

    Por otra parte, tenemos a Mercedes. El principal pensamiento que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en un posible Red Bull-Mercedes es que es imposible. Al igual que con Renault, muchos han sido los roces entre Mercedes y Red Bull. Sin embargo, últimamente se ha extendido el rumor, que cada vez tiene más fuerza, de que Mercedes venda su escudería y quede como un simple suministrador de motores. Se habló de que Wolff y Lawrence Stroll comprasen el equipo, y ahora que se ha hecho oficial que la escudería que se convertirá en Aston Martin será Racing Point, cobra fuerza el rumor de que INEOS, patrocinador del equipo y dueño del antiguo equipo Sky del UCI World Tour, comprará la escudería. En ese caso, Mercedes ya no tendrá pegas en suministrar motores a Red Bull, ya que al estar ellos fuera no ayudarían a un rival directo.

    Finalmente, tenemos a Ferrari. Los italianos ya suministraron motores a los austríacos cuando estos se unieron a la F1. Sin embargo, últimamente ha habido algún que otro roce (dijeron que no ganaron más carreras porque el motor ilegal de Ferrari se lo impidió) y estarían beneficiando a un posible rival directo (en caso de que Ferrari salga de la crisis en la que está sumiso).

    Sea con quien sea, parece que Red Bull tendrá que tragarse algunas palabras del pasado si quiere que alguna de estas tres compañías le motorice en 2022 y temporadas siguientes. Salvo que entre un nuevo motorizador. En ese caso empezarían un nuevo proyecto. No obstante, los motores V6 híbridos que utiliza la F1 son demasiado caros de producir, además de complejos, y no parece que haya ninguna marca interesada en entrar en la Fórmula 1, y menos aún con una competición que sube como la espuma, que está igualadísima año tras año y que es barata en cuanto a costes como la Fórmula E.

    En cuanto a Alpha Tauri, el equipo B de Red Bull (aunque ahora los austríacos ya no le consideran de tal forma, sino como un equipo hermano), parece que Renault no va a poner objeciones a la hora de motorizarle, pues no lo ven como un gran rival para ellos. Además, ahora que han fichado a Alonso y tienen otro piloto estable, además de francés, como Ocon, pueden dar salida a alguno de los pilotos de su academia, como Lundgaard o Guanyu Zhou,  en Alpha Tauri.

    El último en sumarse al debate ha sido el expiloto Ralf Schumacher, quien ha opinado que Red Bull debe montar su propio motor.

    En breves sabremos con quien correrán Red Bull y Alpha Tauri en el Gran Circo cuando acabe su relación con Honda. Cuando eso suceda, aquí la analizaremos.